Habemus trofeo. Cacahué es un 8

Quien tiene gran poder debe asumir su responsabilidad; la decisión por parte del Comité Organizador del ICClaC no fue fácil, ni mucho menos, alquitrán y rones a deshora de por medio, fumata blanca final; los criterios de selección todos, ni uno ha faltado, de los profanos a los más elevados, de los celestes a los más telúricos, pero siempre afines al espíritu Cacahué. Centenares de opiniones han sido, bajo la tiranía de la democracia, unificados.

De los 10 sólo ha quedado uno y es un 8, casi y medio, que se convertirá en 10, uno por categoría, algo así como trino y uno; Oteiza y Chillida estarían orgullosos por ver su línea de tradición costructivista continuada, un elogio a lo austero, a lo primitivo, no enfrentado con lo lúdico; simbiosis minimalista del espíritu Cacahué.

Pena, penita, por los 9 diseños descartados, todos de genio y arte, todos dignos de ser sostenidos por manos vencedoras; aguardarán su momento.

Gracias, miles, a los alumnos del Ciclo Formativo de Escultura del Pancho Lasso de Arrecife.

Al mismo tiempo, la confirmación de los crepusculares Leone el 15 de mayo en la Gala de proyección y entrega de premios del I CClaC, no ha dejado mudo a nadie; los elogios y parabienes se multiplican, tanto que se hace necesario recordar todo lo que los hermanos Romera pueden dar sobre un escenario. Esta versión del clásico de los Yakuzas "Amor de carretera" nacida de guitarrón, alma y armónica debe considerarse el embrión de lo que hoy es Leone.

El Comité de Organización del ICClaC trabaja para confirmar a la mayor brevedad posible la segunda de las presencias amenizadoras y melómanas que engalanarán el Certamen; rumores hay...

¡Larga vida, larga a Cacahué!